10 de junio, presentación del vino Excelencia de bodegas Emilio Clemente en el Palmar

 

En esta calurosa tarde de junio, hacemos una visita a nuestro vecino, el jueves, que es el día donde llevamos a cabo las actividades grupales y pese a que el día comenzaba un poco mal porque nos habíamos quedado sin plazas en la cena maridada por la bodega Emilio Clemente en el restaurante L'Ancó confesamos que esta propuesta nos gustó mucho más: no todos los días se asiste a la presentación de un nuevo vino.

Al leer el programa nos gustó lo diferente: nada de restaurantes, ni de bodegas, ni de locales, ni de hoteles...no. Una barraca a las orillas de la Albufera, en pleno Palmar. 

Allí nos encaminamos en un día que amanecía con nubes, amenazaba lluvia y se portó. Y tanto que se portó.

Nada más llegar nos encontramos con conocidos: Cristina Correoso vino enseguida a saludarnos y darnos la bienvenida a este acontecimiento. No obstante era una de las gestadoras de este vino (es la enóloga de la bodega). Nos recibieron con una copa bien fria de Florante del 2007: un blanco con barrica delicado y fresco. Ahí comenzó el disfrute: venía con unos aperitivos deliciosos. 

Y seguimos conociendo y saludando: Sergio Clemente quien nos había invitado al evento, Mª Carmen, la matriarca del clan, Laura Clemente. Y allí, sobre todo, nos encontramos con conocidos y amantes del vino. 

Mientras una banda de jazz amenizaba la estancia y veíamos caer el sol lentamente. Nos llamaron para que acudieramos a un espacio que habían organizado con sillas donde atendimos a unas palabras tanto del creador y padre de la bodega, D. Emilio Clemente, del Presidente de la D.O. Utiel-Requena D. Vicente Pérez, de D. Rafael Pérez catador y que llevaría a medias la cata que posteriormente realizariamos junto a Dña. Cristina Correoso, enóloga de la bodega. Hablaron de su proyecto, de su hacer, pero sobre todo era un día de felicitaciones por un trabajo que aman y que ha dado tan buen resulado.

Al terminar, nos montamos en unas barcas para darnos un muy agradable paseo por la Albufera y ser espectadores de la más hermosa de todas las puestas de sol. 

Ya de regreso teníamos el fin de fiesta: el catar quien nos había reunido Excelencia. Un tinto equilibrado, muy aromático, goloso y con una tremenda persistencia en boca. Nos gustó. Nos gustó mucho, y nos sentimos afortunados de haber presenciado su perfecta evolución en botella desde que tuvimos ocasión de maridarlo, en primicia, en la sexta cena de grupo de elmiercolestoca en el Restaurante gourmet Oscar Torrijos.

Y seguimos disfrutando de los aperitivos, el vino Excelencia, las conversaciones, la música, la compañía, las conversaciones, las estrellas, la Albufera...Simplemente inolvidable. Gracias por compartirlo con nosotros.